El singular restaurante del Hotel mantiene el estilo de los balnearios de los años 40, lo que le confiere un ambiente absolutamente peculiar.
Su cocina se basa en productos del mar y la montaña castellonenses: Arroces, carnes a la brasa, cocidos y guisos estilo Alcalatén con postres caseros conforman la base de una carta sencilla pero esmerada y adaptada a la cocina tradicional de la comarca.
El restaurante ofrece menús a precios muy asequibles.